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DÍA INTERNACIONAL DE LA LANA

Hoy 9 de abril, celebramos el Día Internacional de la Lana 🐑 por todo lo alto.


En ACOBIJA, estamos llevando a cabo el seguimiento del uso que hacen las especies, en especial la avifauna, de los aportes de lana que realizamos hace unas semanas y, por el momento, hemos observado a las especies objetivo de la actuación: el alimoche común y chova piquirroja, entre otras muchas.


Esta actuación la llevaremos a cabo hasta mediados de mayo para asegurar un aporte continuo de sustrato, durante la fase de reproducción, para la construcción del nido. Para conocer más en detalle el objetivo y las acciones desarrollados en dicha actuación, pinchar aquí.


Gragilla occidental, Alimoche común y Chova piquirroja


¿CONOCES LAS PROPIEDADES DE LA LANA?

La esquila marca el inicio de la nueva temporada, el comienzo de la primavera, y apuntala los pasos previos de que hay que preparar al rebaño de cara al verano. El resultado del esquilado es la obtención de la lana, un producto unico y natural con grandes beneficios para el medioambiente: es renovable, biodegradable y no contamina, ni durante su proceso de producción ni como producto final, al contrario de las fibras sintéticas que, por lo general, derivan del petróleo y no son biodegradables, llegando a integrarse dentro de las cadenas tróficas en forma de microplásticos.


Además, la lana tiene otras propiedades idóneas para actividades industriales e innovadoras por ser transpirable, hipoalergénica, termorreguladora, aislante, antibacteriana, higroscópica (absorción de la humedad), ignífuga y de alta resistencia e impermeabilidad, pudiendo ser utilizada por ejemplo como aislante en la construcción de viviendas, fabricación de muebles, como fertilizante para la agricultura o para usos en la industria farmacéutica cosmética.


Todo ello hace de la lana un producto acorde a las necesidades ambientales, creando empleo y suponiendo una fuente de ingreso adicional para la ganadería tradicional.


¿PERO CUÁL ES EL ACTUAL ESTADO DE LANA?

Hoy en día, la escasa cultura de compra de productos de lana ha conllevado a la pérdida de su valor como producto y a la desaparición de oficios ligados al sector primario tales como el esquileo, el sorteo (clasificación de la lana por su calidad), el lavado, el cardado o el hilado del vellón y, claro, el pastoreo, necesarios para producir el ovillo de lana.


Actualmente, la normativa legal considera la lana como un desecho convirtiéndose en un residuo y, por lo tanto, en un problema para los ganaderos. Además está sometida a una legislación que complica que se puedan crear industrias obreras en las propias explotaciones para comercializar la lana y que conlleva la pérdida de infraestructuras para el tratamiento del producto como los lavaderos de lana.


A pesar de todo, como hemos visto la lana es una materia prima altamente versátil que se presenta como un alternativa sostenible a la producción industrial por sus propiedades biológicas, físicas y químicas y como producto potencial para asegurar la viabilidad económica de las zona rural, proporcionando a la sociedad un material sostenible y duradero de acuerdo con la nuevas políticas medioambientales.


Cada vez es mayor el número de entidades, empresas y consumidores que dan valor a este producto y, poco a poco, se está trabajando en su recuperación. Una de las iniciativas para lograrlo es conmemorar el Día Internacional de la Lana.

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