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RECUPERACIÓN DEL HÁBITAT NATURAL ALIMENTARIO DE ESPECIES CARROÑERAS  

Las aves carroñeras han desarrollado una estrategia que les permite prospectar extensas zonas en busca de alimento. De forma natural, este alimento aparece de manera impredecible y dispersa en forma de cadáveres de animales. Y, aunque actualmente, debido a la prohibición de dejar animales muertos en el campo y a la desaparición (en aumento) de la ganadería extensiva, sigue siendo necesario el aporte continuado de alimento en comederos vallados (muladares o comederos), la presencia continuada de alimento en los mismos lugares no resulta un modo de alimentación natural para estas especies.

El proyecto se completa con el desarrollo de actuaciones que permitan recuperar una forma de alimentación natural a través de la promoción y uso de las Zonas de Protección para la Alimentación de las Especies Necrófagas (ZPAEN) de interés comunitario según lo establecido en el Real Decreto 1632/2011, de 14 de noviembre, y El Decreto 170/2013, de 22 de octubre, del Gobierno de Aragón. Se pretenden favorecer a diversas especies de avifauna necrófagas de interés comunitario como el alimoche común (Neophron percnopterus), el buitre negro (Aegypius monachus), el quebrantahuesos (Gypaetus barbatus), el águila imperial ibérica (Aquila adalberti), el águila real (Aquila chrysaetos), el milano negro (Milvus migrans) y el milano real (Milvus milvus) de acuerdo con el Real Decreto1632/2011 y el punto 1.a) de la sección 2, capítulo II, del Anexo VI del Reglamento (CE) n.o 142/2011, de la Comisión, de 25 de febrero de 2011.

 

El proyecto busca que las especies carroñeras de interés comunitario dispongan de alimento suficiente y accesible, de forma natural, fomentando la conectividad del Corredor Biológico del Sistema Ibérico (y zonas periféricas), permitiendo a la fauna encontrar comida y puntos de descanso para afrontar sus desplazamientos (migraciones, dispersiones o búsqueda de nuevos territorios) con mayores garantías, mediante el uso de las ZPAEN y la revalorización de la ganadería extensiva.

Los objetivos son: 

  1. Contribuir en la recuperación del sector ganadero en extensivo, como el elemento clave para cubrir las necesidades alimenticias las aves necrófagas de interés comunitario.

  2. Informar a las explotaciones de la zona con ganado extensivo, de la posibilidad y los requisitos para dejar restos animales en zonas de protección.

  3. Asesorar y colaborar con los ganaderos en la tramitación de las autorizaciones para acogerse al programa.

  4. Conseguir que un número importante de las explotaciones se adhiera a esta posibilidad.

  5. Que la totalidad del alimento puesto a disposición de las especies necrófagas, sea depositado con arreglo a la normativa vigente y consumido por las especies destinatarias.

LA IMPORTANCIA DE LA GANADERÍA EXTENSIVA

Las cabañas ganaderas en régimen extensivo se han reducido considerablemente en las últimas décadas provocando un descenso importante en las poblaciones de buitres y otras aves carroñeras ibéricas y europeas, puesto que suponía la principal fuente de alimentación para dichas especies. 

La aparición de la enfermedad de las EET (Enfermedades Espongiformes Transmisibles), provocaría un enorme y generalizado descenso del alimento disponible, que afectaría gravemente a estas especies, especialmente a las aves necrófagas, cuya supervivencia depende, en mayor medida, de la aparición de carroñas dispersas en el territorio.

 

La ganadería extensiva, además de su importancia histórico-cultural, tiene una serie de beneficios ambientales destacables, encuadrados en los denominados servicios ecosistémicos (servicios que proporciona la naturaleza de forma gratuita y son imprescindibles para el bienestar humano) como son:

 

  • La dispersión de semillas por endozoocoria.

  • La prevención de incendios realizando el desbroce natural de material potencialmente inflamable. De igual modo, los pastores realizan un seguimiento continuo y vigilancia de incendios.

  • La fertilización del suelo debido a la incorporación de materia orgánica proveniente de las heces de los animales, puesto que las deyecciones sólidas de ganado crean huecos o nichos de regeneración que permite la germinación de semillas transportadas hasta allí.

  • Ayuda a controlar las especies de flora ya que el pastoreo es selectivo, favoreciendo a unas especies y perjudicando a otras, lo que modifica las relaciones de competencia y cooperación entre plantas.

  • Beneficia la polinización dado que las vías pecuarias favorecen la proliferación de los insectos siendo muchas las especies polinizadoras.

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